El nuevo enfoque de la política comercial de EE.UU. en el período 2017-2019 y sus implicancias para las negociaciones comerciales del Ecuador

Abstract

El triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EE. UU. de 2016 abrió la puerta a la aplicación de un programa económico heterodoxo, que se aparta en gran medida de las líneas por las que ha discurrido la política económica de EE. UU. en los últimos 30 años. Los cuestionamientos por parte de Trump a la participación de los EE.UU. en la Organización Mundial de Comercio (OMC), siendo bastante crítico de las reglas que rigen a los estados miembros en relación al comercio internacional, renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), calificado como el peor error de los EE.UU., la retaliación con aranceles a China y otros países, echaban al piso todo el proceso de apertura comercial mundial impulsado por ese país, modelo que desde entonces ha sido seguido por gran parte del mundo. Un análisis serio de los términos en los cuales se están realizando las negociaciones de EE.UU. con Canadá, México, China y el resto de sus socios estratégicos más importantes, y el papel asignado a los tratados, convenios y acuerdos comerciales, puede dejar un conjunto de experiencias y enseñanzas importantes, para que el Ecuador pueda generar una posición coherente e informada, en el momento en que surjan las condiciones adecuadas para negociar con EE.UU. un tratado de libre comercio, considerando que se trata del principal socio comercial del país. En el primer capítulo se analizarán los principales cambios en la política comercial de los Estados Unidos y cómo ellos podrían afectar el relacionamiento con sus principales socios comerciales. Y en el segundo capítulo evaluaré las consideraciones que generan esos cambios en la política comercial estadounidense frente a la posible negociación de un tratado de libre comercio por parte del Ecuador, bajo ese contexto.